viernes, 29 de junio de 2012


No me hables más de él, es la historia que más me gusta, la que más me apasiona, podría contarte toda su vida con una ilusión constante, podría contarte nuestra historia con detalles y recordando fechas y lugares sin importar el tiempo que haya pasado.



Dejar la luz encendida, no quiero que aquél fantasma te encuentre tendida entre los huesos de aquél amor que desea descarnarte, que busca insaciablemente el tentarte y llevarte para que no regreses jamás. No apagues la luz, no dejes que te consuma, no dejes que regrese, se apoderará de ti y no sabrás como deshacerte de él. Habla bajo, puede escucharte, su conexión contigo sigue latente, no creas, duda siempre de él, habla despacio y entrecortado. Sé que para ti es perfecto, ese dolor no lo padeces, tienes adolorida el alma así que ya no lo sientes. –En ese momento fui consciente de todo lo que había perdido estos años- Cuando noté el peso ligero de sus palabras, su mirada dulce debajo de mi almohada, su cicatriz constante amargando mis mañanas fue cuando deseé no estar destinada a un lugar lejano, deseé haber elegido una senda diferente en la vida, una que me permitiera formar parte de su mundo.
El aire se deshoja cuando pronuncio su nombre.




¿Lo ves? no ha pasado tanto tiempo.
Y de nuevo nos aferramos contra toda lógica, contra toda experiencia y como niños nunca dejamos de albergar esperanzas.

jueves, 28 de junio de 2012

Puedes estar con una persona y ser feliz pero no amarla o puedes amar a alguien y no querer estar con esa persona.




Las circunstancias nunca están de nuestro lado.